Mañana si Dios quiere, es el gran día. A las 9,30 cogeremos
el tren que nos llevará a Pamplona y desde allí a Roncesvalles, donde iniciamos
el Camino. No he hablado de mi acompañante. Se trata de mi hija Alicia. Tiene
16 años .
Cuando presenté la idea en casa, ella no se lo pensó dos
veces, y de forma impetuosa, se ofreció a realizarlo conmigo. Más tarde le
presentararía el maravilloso plan de madrugones, caminatas, dolores y heridas
que adornarían sus vacaciones, creyendo que se lo pensaría mejor, pero " a lo
hecho pecho", me dijo.
Hemos entrenado y planeado juntos, nuestra ruta. El resto
de la familia , ha preferido ver la
experiencia detrás de las gradas, esperando el resultado final. Eso sí, nos han prometido su aliento… algo es
algo.
Creo que ha llegado el momento de responder a una pregunta,
donde yo he sido el primer interesado en conocer la respuesta. ¿Por qué hago el
Camino a Santiago? ¿Qué ha sido capaz de empujarme tan fuertemente, a agotar todas mis vacaciones en unos días de austeridad y sacrificio?...
Dicen que el Camino se ha convertido en símbolo y metáfora de la condición cristiana y humana. La
salida, llena de ilusión, energía y optimismo. La aridez de algunas etapas, que
nos ayuda a reflexionar, sobre los momentos de duda, desaliento y soledad, en la
que nos adentramos muchas veces. La llegada,a pesar de los obstáculos, donde
uno recibe siempre la gloria, el gozo…
Me gustó
mucho, leer La Carta Pastoral de los Obispos del Camino de
Santiago en 1988. En un de sus párrafos dice:
Peregrinar a la Tumba del apóstol Santiago es imagen y
metáfora de la vida del hombre que, encontrándose con la fe apostólica, anhela
la paz y el sosiego después de vagar por el mundo, esperando gozar un día de la
felicidad eterna. Hasta entonces vive esa sensación de exilio, constatando la
dureza del camino con el peso de la soledad y de la duda, del sufrimiento y del
gozo. La espiritualidad del éxodo es la del hombre que lucha por liberarse de
toda opresión hasta conseguir la tierra prometida, recordando como dice san
Juan de la Cruz, que “para venir a lo que no sabes, has de ir por donde no
sabes; para venir a poseer lo que no posees has de ir por donde no posees; para
venir a lo que no eres, has de ir por donde no eres”. La parábola del Hijo
pródigo es el arquetipo de la peregrinación donde se describe el alejamiento
que precede al retorno y a la conversión. También lo es la parábola de la oveja
perdida, en la que en su retorno a la casa del Padre Cristo la trae sobre sus
hombros. La peregrinación es un caminar guiado por Cristo y encaminado hacia él.
Durante el mes de Julio de
2012 en la Oficina de Peregrinaciones se recibieron 32.820 peregrinos. La
motivación que expresaron personalmente los peregrinos fue: Religiosa 13.669
(41,65%),Religiosa-cultural 16.963 (51,68%), sólo cultural 2.188 (6,67%)
¿Cuál es mi motivo? Sin ninguna duda, que lo religioso ocupa el
primer lugar de mis planteamientos, la búsqueda del esfuerzo, la reconciliación, la gran "perdonanza", tal y como recoge la tradición
jacobea. La oportunidad privilegiada de sentir y
de vivir la Iglesia en su variedad, en su pluralidad, en su misma vitalidad y
condición peregrina.
San Pablo
nos exhorta :” deshaceos del hombre viejo, revestíos del
nuevo “(cfr Efesios 4, 22-24). Sí, siento esa necesidad de
conversión. La rutina se instala muchas veces, cuando uno siente que es
mediocre y tibio. Es tiempo de salir de ese homúnculo autosuficiente.
El hombre
viejo que siento en mí , hace que todas las dificultades, las vea siempre espinosas,
las tentaciones insuperables, el egoísmo instalado, el trabajo estéril, la
carne demasiado apetecible y la vida demasiado corta. Muchas traiciones, canjeadas por instantes complacientes.
Es tiempo
de volver a casa, es tiempo de caminar hacia el Padre. El hijo pródigo,
emprende el camino.
Esta
versión moderna de la parábola del Hijo
pródigo, me alienta a dar mi primer paso.
Renovar la vida es lo mejor.
ResponderEliminarles acompaño con mis oraciones.
Que Dios les de su fuerza y los bendiga
Gracias por compartir.
¡Que tengáis un buen camino!
ResponderEliminarAnimo Angel
ResponderEliminarLa cruz del señor os enseñe como a Santiago con Juan y Pedro la gloria en la transfiguración para poder acompañarle en el camino de la Pasión.
Creer implica muchas veces dejarse perdonar.
Os encomendamos los agradecidos
Que linda compania llevas,se daran mucha fuerza y valentia de la mano del Senor.
ResponderEliminarMil bendiciones les mando.
Caro Angelo auguro a te e a tua figlia Alicia un buon cammino. Che il Signore vi accompagni! Un grande abbraccio
ResponderEliminarAngelo, hoy es el gran día! Mucho ánimo y bendiciones en cada día de este Camino que hoy emprenden y que seguro será muy especial!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo,
Dios os acompañe en este camino que habéis emprendido Alicia y tu cargados de ilusión. Os seguiremos a diario y rezaremos pos vosotros. Un beso grande para los dos
ResponderEliminar¡¡¡ Ultreia , peregrinos!!!
ResponderEliminarMi oración
El otro día comentando con mi marido la existencia de este blog, le pareció una idea excelente (tiene muchas ganas de hacer el camino), asi que nos quedamos como seguidores.
ResponderEliminarSomos de León, si pasas por aquí y necesitas algo, no dudes en decirlo, encantados.
¡¡¡Buen camino!!!
Llego hoy aquí, un poco tarde, siguiendo el enlace de siete en familia.
ResponderEliminarSobre el camino, dejo el comentario en SEF
De esta entrada, me ha tocado mucho el párrafo de la Carta Pastoral de los Obispos sobre el Camino de Santiago Me ha recordado que esta peregrinación por la tierra, por la vida, es peregrinación de veras Y es que a veces me empeño en que sea siempre jardín, y me enfado cuando es camino duro y lleno de piedras
Gracias ¡¡¡